En todo lo largo de cada aparato, están colocados unos imanes permanentes, cuyas líneas de campo magnético son atrapadas por un cilindro de hierro blando (de acuerdo con los volúmenes).
¿Cómo se traduce esta eficacidad?
Las macromoléculas, atravesando este campo magnético, soportan una polarización cuyo propósito es desorganizar estas estructuras del tipo conglomerado, y así llevarlos a su estado original de moléculas, naturalmente en suspensión en el agua.
Desde que dejaron este campo magnético de inducción, conservan una remanencia magnética de varias horas (plazo netamente superior al tiempo de circulación del agua en las canalizaciones).
En el caso de agua ferruginosa, de oxidación de canalización, de residuos de soldadura, entra en un proceso anti-corrosión (además del fenómeno de electrólisis).